A veces me pregunto de donde vienes
quizás alguien te ha enviado
para que llenes mis dias
y compartas mis noches
para que sepultes para siempre
el vacío que viajaba conmigo:
Pegajoso como el sudor
y perpetuo como la propia sombra.

A lo mejor ha sido el azar
o el destino, quien sabe
en realidad eso no importa
Es bonito saber que alguien te espera
que la casa contiene algo más
que muebles y recuerdos grises de soledad.
La soledad es buena cuando uno la busca
pero cuando te la imponen es un duro castigo.

Me alegro que estés conmigo, ¿sabes?
Ahora todo es muy distinto y por fin
he dejado de preguntarme qué cosa terrible
había hecho mi corazón
para vivir desterrado en el mundo de la tristeza.

Puede que fuera un impaciente y tan solo deseaba tu llegada
pero, ¿quien podría reprocharme eso?
¿Quien podría preferir el miedo de vivir otro día sin esperanza
a la placidez y bondad que siente el corazón
cuando se sabe amado y a la vez es capaz de amar?
A veces me pregunto muchas cosas
y normalmente, la respuesta siempre eres tú.

Autor : Joan Moret